Yo no creo en ellas, pero ¡haberlas haylas!
Cuando se habla de brujas todo el mundo le viene a la mente la bruja esa fea con sombreo puntiagudo volando sobre una escoba, pero lo cierto es que en esta tierra, donde abundan aunque en ellas no creo pero haberlas haylas!
No tienen ese aspecto, por lo general son mujeres del pueblo normales y corrientes, son por lo general mayores con muchos conocimientos de la naturaleza también mucha imaginación.Cuando no se podía ir al medico, porque no había medios para ello, se recurría a la famosa "bruxa", meiga o al curandero, que con hierbas,cataplasmas y otros potingues, te bajaban la fiebre
arreglaban huesos,curaban el espíritu, en fin toda clase de males.
A las vacas cuando no daban leche, por cualquier motivo a saber?
cosa de veterinario, "supongo".
Se traía a la "bruxa"meiga, a casa y esta con unos rezos unos potingues
que la frotaba las ubres, acompañada de humos, el caso es que la vaca volvía a dar leche.
"Explicación de un experto en el tema, una de las posibles causas de que la vaca no da leche, después de haber parido, es que retenga la leche solo para el ternero y no deja que la ordeñen, la retiene , en ciertas situaciones,el reflejo de liberación de la leche puede ser inhibido.
Eventos externos no placenteros que ocurren durante el ordeño(dolor,excitación o temor).
Cuando esto ocurre la leche no es liberada.
Otra de las causas mas comunes es la mamitis:
inflamación del tejido mamario.
En este caso no deja mamar al ternero ni sale leche al ordeñarla.
Otro problema que suele ocurrir son los "cocos"las gusaneras o coqueras han exigido del pastor una rápida actuación.Su farmacopea viene dictada en estos casos por la fumigación de la herida con digital triturada(Aldeanueva) del Camino y Cañamero), por lavarla con agua serenada el día de San juan (Casar del Palomero) y por colocar sobre ella ruda y cardo santo cocidos con vinagre. Los aspectos de la magia simpática muestran aqui su cara singular. En Ahigal colocan una bizna del rabo de la oveja bajo una piedra de un lodazal, con la particularidad de que la lana se convertirá en culebra, que al escapar hará que también escapen los gusanos.En Torre de Don Miguel dicen que éstos se secan cuando se seque un cardo que el pastor entierra al lado de una encina. dos hojas de cardo santo colocan bajo un terrón en el sitio que previamente pisó la oveja con la pata de la parte afectada, con la seguridad de que la podredumbre de la planta acarrea la muerte de los gusanos (Coria, Helechosa de los Montes, Garvín y Serrejon). Se consiguen los mismos efectos atando un cardo santo a la pata más alejada de la gusanera (Riolobos y Mirabel). Por Guijo de Granadilla arrancan un sacapeo pisado por el animal y lo vuelven con las raíces hacia arriba, repitiendo la operación durante tres mañanas seguidas antes de salir el sol y recitando el siguiente conjuro para que el resultado sea el apetecido:
Dios te guarde, buen varón,
buscándote vengo yo;
los cocos de mi ganado
maldecidos sean de Dios.
Que se sequen,
como os hais de secar vos.
Entre las enfermedades propias de las mamas el pastor destaca la mamitis (ubreras en la comarca de Campo Arañuelo). Las ovejas muestran inapetencia, tristeza, fiebre y tumefacción, calor y dolor de las tetas. Un primer tratamiento consiste en ordeñar completamente la ubre enferma.
En Casar de Palomero dicen que una cataplasma de hojas de aliso es más efectiva que el ordeño, ya que le retira hasta la mínima gota de leche.Para conseguir la sequedad total en Marchagaz le frotan las mamas con esencia de romero. La tumefacción aunque seguramente el animal lo agradecerá doblemente si las friegas se le dan con pomadas calmantes y emolientes, cual es la fabricada en Torrejoncillo con extracto de belladona y manteca. Más pobre se presenta el recurso de Alía, donde el sobeteo sólo se emplea aceite de oliva.En otras poblaciones de la comarca del Ibor el aceite de oliva se configura como componente de un emplasto en el que también tienen
algo que decir la cera y la clara de huevo. Generalizada está para estos fines la combinación de la manteca de cerdo y el aceite, a ser posible de la lámpara del Santísimo. En Ahigal y Guijo de Granadilla la acompañan con una clara de huevo, en Hoyos con unas gotas de limón y de en Aldeanueva del Camino con un poco de miel. Es posible que cientificamente la efectividad de todas estas medicinas supere en mucho a la costumbre de Malpartida de Plasencia de meter bajo la ubre, con intención de ahumarla, una pala en le que arden hojas de laurel. Para la curación de las heridas de las mamas el recetario se presnta cuantioso siendo asi todo él de uso externo.
Están la manteca, la ceniza de ubre de vaca con sebo, la miel, el orin de niño, el agua de malvaas con aceite, el agua herrada y la baba de los perros lazarillos. Hay ciertas heridas de las tetas que see creen originadas por supuestas mamadas de serpientes. En Oliva de Plasencia con el correspondiente ensalmo, que también se recita cuando la victima del goloseo es una mujer, se logra la total sanación:
Una culebra llegó y de la oveja mamó,
pero la Virgen María mamando la sorprendió.
por beber de esa leche yo te
condeno que por el día y por la noche
andes arrastras por el terreno.
Revista de folklore.revista nº160 tomo 14ª año 1994 extremadura.
"Ollos de sapo cornos de boi
o meigallo aqui dentro
saia voando co vento
deste sitio vendicido
por Maria do Viso
ca vaca o leite dea
pa criar os que teña
antes ou despois."
LA VACA "RUBIA"
Eventos externos no placenteros que ocurren durante el ordeño(dolor,excitación o temor).
Cuando esto ocurre la leche no es liberada.
Otra de las causas mas comunes es la mamitis:
inflamación del tejido mamario.
En este caso no deja mamar al ternero ni sale leche al ordeñarla.
Otro problema que suele ocurrir son los "cocos"las gusaneras o coqueras han exigido del pastor una rápida actuación.Su farmacopea viene dictada en estos casos por la fumigación de la herida con digital triturada(Aldeanueva) del Camino y Cañamero), por lavarla con agua serenada el día de San juan (Casar del Palomero) y por colocar sobre ella ruda y cardo santo cocidos con vinagre. Los aspectos de la magia simpática muestran aqui su cara singular. En Ahigal colocan una bizna del rabo de la oveja bajo una piedra de un lodazal, con la particularidad de que la lana se convertirá en culebra, que al escapar hará que también escapen los gusanos.En Torre de Don Miguel dicen que éstos se secan cuando se seque un cardo que el pastor entierra al lado de una encina. dos hojas de cardo santo colocan bajo un terrón en el sitio que previamente pisó la oveja con la pata de la parte afectada, con la seguridad de que la podredumbre de la planta acarrea la muerte de los gusanos (Coria, Helechosa de los Montes, Garvín y Serrejon). Se consiguen los mismos efectos atando un cardo santo a la pata más alejada de la gusanera (Riolobos y Mirabel). Por Guijo de Granadilla arrancan un sacapeo pisado por el animal y lo vuelven con las raíces hacia arriba, repitiendo la operación durante tres mañanas seguidas antes de salir el sol y recitando el siguiente conjuro para que el resultado sea el apetecido:
Dios te guarde, buen varón,
buscándote vengo yo;
los cocos de mi ganado
maldecidos sean de Dios.
Que se sequen,
como os hais de secar vos.
Entre las enfermedades propias de las mamas el pastor destaca la mamitis (ubreras en la comarca de Campo Arañuelo). Las ovejas muestran inapetencia, tristeza, fiebre y tumefacción, calor y dolor de las tetas. Un primer tratamiento consiste en ordeñar completamente la ubre enferma.
En Casar de Palomero dicen que una cataplasma de hojas de aliso es más efectiva que el ordeño, ya que le retira hasta la mínima gota de leche.Para conseguir la sequedad total en Marchagaz le frotan las mamas con esencia de romero. La tumefacción aunque seguramente el animal lo agradecerá doblemente si las friegas se le dan con pomadas calmantes y emolientes, cual es la fabricada en Torrejoncillo con extracto de belladona y manteca. Más pobre se presenta el recurso de Alía, donde el sobeteo sólo se emplea aceite de oliva.En otras poblaciones de la comarca del Ibor el aceite de oliva se configura como componente de un emplasto en el que también tienen
algo que decir la cera y la clara de huevo. Generalizada está para estos fines la combinación de la manteca de cerdo y el aceite, a ser posible de la lámpara del Santísimo. En Ahigal y Guijo de Granadilla la acompañan con una clara de huevo, en Hoyos con unas gotas de limón y de en Aldeanueva del Camino con un poco de miel. Es posible que cientificamente la efectividad de todas estas medicinas supere en mucho a la costumbre de Malpartida de Plasencia de meter bajo la ubre, con intención de ahumarla, una pala en le que arden hojas de laurel. Para la curación de las heridas de las mamas el recetario se presnta cuantioso siendo asi todo él de uso externo.
Están la manteca, la ceniza de ubre de vaca con sebo, la miel, el orin de niño, el agua de malvaas con aceite, el agua herrada y la baba de los perros lazarillos. Hay ciertas heridas de las tetas que see creen originadas por supuestas mamadas de serpientes. En Oliva de Plasencia con el correspondiente ensalmo, que también se recita cuando la victima del goloseo es una mujer, se logra la total sanación:
Una culebra llegó y de la oveja mamó,
pero la Virgen María mamando la sorprendió.
por beber de esa leche yo te
condeno que por el día y por la noche
andes arrastras por el terreno.
Revista de folklore.revista nº160 tomo 14ª año 1994 extremadura.
o meigallo aqui dentro
saia voando co vento
deste sitio vendicido
por Maria do Viso
ca vaca o leite deapa criar os que teña
antes ou despois."
LA VACA "RUBIA"
La vaca "Rubia" había parido una ternera preciosa y daba leche que no le cabía mas en las ubres, pero de pronto a la mañana siguiente,
"Rubia" mugía, y por mas que la abuela de sus ubres tiraba, ni gota de leche sacaba,"Raio parta o demo",se oia exclamar a la abuela en la cuadra.
"Xa se meteo ca Rubia a nosa mellor vaca".Se lo decía en la cocina al abuelo.
"Manda carallo" exclamaba este, "pois xa sabes que tes que facer, Sara "
La abuela si sabía, a la "bruxa" avisaría.
Recurrían a la meiga para sacarle el maleficio que Rubia podía tener y así volver a dar la leche tan apreciada.
La meiga su tiempo se tomaba,con rezos y haciendo humo que parecía que ardía la cuadra,con sus potingues y cataplasmas a Rubia curaba.
La meiga su tiempo se tomaba,con rezos y haciendo humo que parecía que ardía la cuadra,con sus potingues y cataplasmas a Rubia curaba.
de inmediato la abuela de sus ubres leche sacaba, y al ternero que antes rechazaba,de mamar daba.
no creo en ellas pero haberlas haylas!!!
